Especialistas revisaron propuestas para avance de economía venezolana

By: DIC - UCV

Petroestado, populismo e imaginario petrolero, fueron los temas claves de la cuarta sesión del Simposio que se realiza en el marco de la celebración de los Cincuenta Años del CENDES. En esta oportunidad, los profesores Asdrúbal Baptista del IESA, Humberto García Larralde y Nelly Arenas de la UCV, expusieron una serie de elementos que signaron el retroceso de la economía actual de Venezuela, producto de la renta petrolera

Las preocupaciones en torno al desenlace de la dinámica económica que desató la bonanza petrolera de los años sesenta y setenta, estuvo a cargo de Asdrúbal Baptista. La tesis del profesor se sustentó a partir de las perspectivas que tuvieron especialistas como Juan Pablo Pérez Alfonso y Domingo Maza Zavala, quienes para la época ya advertían las repercusiones que traería consigo la renta petrolera. Trajo a colación que para estos expertos, y en especial para Maza Zavala, “el petróleo sería una maldición, por lo que era preferible dejarlo bajo tierra”.

Asimismo, el conferencista reflexionó acerca de la dependencia de un “capitalismo rentista” que pasó a ser lo que hasta hoy se conoce como el enclave económico. Aclaró que cuando se habla de desarrollo, no se sabe a qué se refiere. Baptista supuso lo “difícil de asumir que el país ha retrocedido”, toda vez que desde 1920 hasta los años ochenta, Venezuela se encaminaba, según los números, indeteniblemente hacia el desarrollo. Y aunque rescató que la nacionalización petrolera introdujo al país en el mercado mundial, acuñó que dicho paso suponía la permanencia de una sociedad progresista que nunca maduró.

 

Para superar la economía rentista

 

Por su parte, Humberto García Larralde, reflexionó en torno a las posibilidades de desarrollo, a partir de la revisión crítica de las estrategias hechas en el pasado. Introdujo una serie de elementos que explican del porqué el país no ha vencido la economía rentista, especialmente por los efectos indeseados que causó la nacionalización petrolera de los años setenta. Resultados que en gran medida propiciaron la formación de un “Petroestado”, cuyos pilares son “el presidencialismo, el clientelismo y un profundo paternalismo”. 

Entre otras secuelas, apuntó Larralde que Venezuela padece una caída sostenida de la productividad, pese a que al ingreso petrolero, “ha sido el más alto de toda la historia”. Este desplome ha permitido la pérdida de dinamismo económico, propiciando en el Estado medidas que sólo atienden a sueldos y salarios, cuando la salida es reactivar la economía a través de inversiones, contrataciones, etc.

Por su parte, Nelly Arenas, no escatimó en descubrir que la “conducta económica” venezolana obedece en buena medida a un cúmulo de representaciones de la realidad, cuyo origen tuvo lugar en la nacionalización del petróleo. Una perspectiva hacia el desarrollo que suponía acabaría con la economía rentista practicada desde los tiempos de Gómez, pero que nunca ocurrió. Sostuvo Arenas que ese imaginario redentor volvió a oxigenarse con la figura de Chávez, colocándose como propia la visión de la siembra petrolera y el tema de la “renacionalización “.  Arenas recomendó seguir estudiando el imaginario petrolero para entender la economía venezolana.

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