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VARGAS: A 10 AÑOS DEL DESLAVE
Es difícil decirlo pero, al parecer, lo político privó sobre lo técnico en la tragedia natural que azotó a Vargas en 1999.
La afirmación surge de las conclusiones del foro "Una Mirada Retrospectiva” efectuado en el marco del evento Encuentro Vargas 1999-2009 Aprendizajes Realizado.”, que se lleva a cabo entre el 26 y 27 de noviembre en la Sala Francisco de Miranda de la Universidad Central de Venezuela , donde diversos especialistas de diferentes áreas se reúnen para analizar aportes y aprendizajes que el fenómeno natural de la vaguada dejó en la conciencia ciudadana y en el diseño de políticas públicas de Estado.
Entre los ponentes se encontraba el ex ministro Carlos Genatios, que asumió el cargo de autoridad única durante el deslave, quien advirtió que la canalización de las cuencas fue uno de los principales retos al comienzo de la reconstrucción, pero que a pesar de esto se incumplieron las recomendaciones técnicas y se disminuyó la calidad de las obras.
"En el caso de la canalización de El Cojo, el trazado fue inadecuado y se usaron gaviones, que no era lo que habíamos recomendado. Con las lluvias de 2005, el gobierno nacional asignó al Ministerio del Ambiente canalizar de nuevo esa cuenca, y se efectuó correctamente en 2007. Pero nunca se fijaron los responsables por los recursos desperdiciados", criticó el docente de la UCV.
Por su parte, Ángel Rangel, que era el director nacional de Protección Civil al momento del deslave, coincide con Genatios en que no fueron atendidas las propuestas del grupo de expertos en desarrollo urbano, que evaluó el riesgo de los suelos y de los afluentes.
Por su magnitud en daños y en afectados, Rangel opina que la tragedia de Vargas ha sido la más grande en la historia del país. La cifra de los fallecidos durante la emergencia de hace 10 años todavía es difusa entre los especialistas pero, según algunos cálculos, aproximadamente 7.000 personas murieron y miles tuvieron que desplazarse. "¿Y cuántos albergues hay en el litoral?
Sólo uno, que está en Arrecife. No hemos aprendido que no se trata de salir del lugar de la emergencia, sino prepararnos para actuar si se presenta", indicó.
A juicio de Maritza Montero, miembro de la Red de Apoyo Psicológico UCV, sostiene que en situaciones de riesgos se debe mantener la ética. Las familias no deben separarse y los niños deben permanecer con la misma vestimenta con la cual fueron rescatados, pues de esta manera se facilitaría su reconocimiento ante sus familiares.
El panel que estuvo integrado por Carlos Genatios, Ángel Rangel, Maritza Montero y Martín Villalobos, revelaron en sus conclusiones que la ausencia de un plan nacional de respuesta comunicacional ante sucesos similares, la escasa formación en prevención con la que cuenta el gobierno nacional y la fragilidad que en la actualidad tienen las barriadas caraqueñas y el estado Mérida hacen posible una repetición de la Tragedia de Vargas.