- Año de Creación: 1958
- Ubicación: Edificio Dirección de Deportes, Ciudad Universitaria
- Junta Directiva
¡Suelta la Resina y Agarra la Roca!
- Torrellero, 2018
¡Suelta la Resina y Agarra la Roca!, grito que enmarca un encuentro nacional de escaladores en el que no solo se va a escalar hasta que no se pueda apretar ni un vaso con agua, va de la mano con el requipamento de rutas, cambios de descuelgues y reuniones, limpieza de caminos y sectores abandonados y lo más importante, trabajo con la gente de las comunidades, sobre todo dirigido a sus niños, como fue el caso de la más reciente edición en Torrellero, donde los más pequeños de la comunidad fueron el centro de atención.
Semanas antes empezaron los preparativos, limpiar caminos, habilitar sectores tapados por el monte, limpiar rutas, acondicionar zonas de acampada, y decenas de actividades que no nos imaginamos y sin las cuales no sería posible el evento que inició el jueves 11 de octubre. Al llegar los escaladores eran recibidos por Edgar “Pan de Bolita” (organizador) y se les asignaba una de las zonas de acampada localizadas en los jardines de las casas de Torrellero, donde se podía hacer uso del baño, las duchas y la cocina.
En lo deportivo el evento estuvo marcado por encadenes espectaculares. Lia Castillo (Lara, 15 años), el día sábado pasó con la solidez que la caracteriza por los pasos de Chicho el Bárbaro (5.13c / 8a+), una ruta de unos 22 metros que empieza en un bloque para luego continuar por un extraplomo espectacular, manteniendo una dificultad continúa hasta la reunión, donde el último crux a menos de medio metro de la reunión hizo botar el pegue a varios duros escaladores. Un logro extraordinario para Lia, tercer ascenso de la vía y primer femenino, además el grado más alto en roca alcanzado para una escaladora latinoamericana, ya reseñado por varios medios fuera del país. Jesus Lobo “Chucho” (Mérida) el día sábado en la mañana decidió probar los pasos de Chicho el Bárbaro para calentar, durante el pegue cambió de opinión y terminó encadenando sólidamente la vía por segunda vez, confirmando el grado. Otro encadene memorable fue el de Manuel Escobar (Guárico, 28), el día viernes firmaba un pegue que fue tema de conversación en todas las casas de Torrellero donde se alojara un escalador. En la reunión de Chicho El Barbaro (5.13c / 8a+) inicia otra vía, Paranoia (5.12d / 7c), de unos 20 metros de imponente extraplomo. Temprano en la mañana, Manuel leyó bien ambas vías, luego de que Lia le diera algunos datos sobre Chicho El Barbaro, rapelo y examinó solo de vista los pasos de Paranoia. Su objetivo era unir las dos vías al primer pegue, 40 metros continuos que permiten pocos descansos, el resultado lleva por nombre Nirvana (5.14a / 8b+). La pared es imponente, el largo de una cuerda no alcanza para unir ambas vías y ser descolgado al suelo, es necesario llegar a una amplia repisa, desencordarse y desde allí descender caminando.
Sin embargo, los escaladores con los niveles de locura, técnica y fuerza necesarios para apretar en esos niveles eran la minoría, como es obvio. Cada quien disfruta la escalada a su nivel, y eso se vió durante el evento, me atrevo a decir que los escaladores que más se divirtieron fueron precisamente los más novatos. Son varias la vías en Torrellero que combinan poca dificultad y más de 25 metros de altura, lo que para cualquier iniciado, supone una diversión adicional, más aún si mientras escala es observado por Araguatos, Guacamayas y Loros. Los escaladores de nivel intermedio contaron con cientos de metros de escalada y diversión, probando rutas a vista sin idea del grado. Como nota adicional se abrió camino hacia el Sector Pedido, una zona de escalada que no se visitaba hace más de 10 años.
Además de escalar y escalar, se llevaron a cabo importantes acciones sociales. Los integrantes de Cerro llevaron varias docenas de uniformes deportivos y escolares para los niños de la comunidad, y todos los escaladores contribuyeron en menor o mayor medida con donaciones de todo tipo. Cheo García realizó actividades con los niños más pequeños, llevándolos a conocer en los alrededores varias cascadas, en una actividad que contó con varias dinámicas de aprendizaje. Fueron varias las actividades de integración entre escaladores y los habitantes de Torrellero, cada grupo tuvo la oportunidad de quedarse en uno de los jardines de estas casas, compartir desayunos, cenas, postres y amenas charlas, en definitiva, cada escalador se fue de Torrellero con un lugar donde regresar de visita, con la excusa de escalar.
Cerró el evento una fiesta donde asistieron escaladores y habitantes de torrellero. Con rifas de prendas deportivas se inició un evento que se llenó de fuerza y energía con la llegada de un conjunto de música llanera, ni las repetidas fallas eléctricas pudieron acabar con el evento. Agradecimientos especiales para Pan de Bolita, sin su patrocinio personal y horas de trabajo dedicadas ni este ni el pasado encuentro en La Azulita hubieran sido una realidad.
Los más resineros, la dura selección de Guárico, fue tocada por el eslogan #Suelta la Resina y Agarra la Roca#, a tal punto que serán la sede del próximo evento. Nos vemos en el Paurario.
Autor: Carlos Carrasquel @cicarrasquel
