- Año de Creación: 1941
- Número de Escuelas: 1
Número de Institutos: 1 - Decano: Dr. Carlos Ciangherotti
seÑORES MIEMBROS DEL PRESIDIUM, AMIGOS TODOS….
Es momento de agradecer a las personas e instituciones que hicieron posible este evento, a pesar de todos los elementos en contra del mismo: A nuestra distinguida Rectora, Dra. Cecilia García Arocha, a la Facultad de Farmacia, a la Cámara Venezolana del Medicamento, a través de la Fundación Caveme, a la Sociedad Venezolana de Farmacéuticos Patrocinantes, a los Laboratorios Nolver y Schering-Plough de Venezuela. Además, quiero agradecer a los Dres. Anita S. Israel, Neira Gamboa, y Alexis Mendoza, y a los estudiantes del Postgrado de Farmacología, por ayudarme a construir este milagro, a los coordinadores y participantes en los simposia, a los profesores que dictaron las conferencias magistrales, muy especialmente a los doctores Raquel Mata, Víctor Márquez y Hermes Garbán, tres venezolanos que cumplen destacada labor en instituciones del exterior quienes dejaron sus actividades habituales para venir a acompañarnos solamente a cambio de nuestro afecto. A Gladys, a Marisol, a Vilma y a todo el personal de apoyo de esta Facultad. Gracias!!!
En la conmemoración de los 45 años de la creación del Postgrado de Farmacología y los 60 años de la Cátedra de Farmacología no voy a decir un discurso, hoy les contaré una historia de sueños que me gusta contar porque la historia nos da sentido de pertenencia, sin historia no hay porvenir, sin historia no podemos mirar al futuro, …… hay que conocer la historia. Esta es una historia de una soñadora dedicada a ustedes que también tienen sueños que quisieran se convirtieran en realidad:
Cuentan que allá por principios de los años 30, uno de los primeros farmacólogos, Otto Krayer, alumno de Paul Trendelenburg, a través de clases magistrales y prácticas logró sembrar una semilla de farmacología en la mente y en el corazón de dos jóvenes alumnos de medicina en Alemania, los Doctores Siegbert y Elly Holz, semilla que no sólo se transformó en amor y entusiasmo por esta ciencia que recién nacía de la mano de Schmiedeberg, Buchheim, Abel, y Ehrlich, entre otros, sino también en un deseo de esparcir sus enseñanzas de la farmacología do quiera que fueran. Vienen las dos conflagraciones mundiales, y después de la Segunda, el Dr. Krayer se traslada a la Escuela de Medicina de Harvard, en los Estados Unidos donde acoge bajo su dirección a otro maestro de farmacólogos, el Dr. Ulrich Trendelenburg, posteriormente muy vinculado a nuestra Cátedra de Farmacología. Antonio Muskus y Salvatore Pluchino fueron dos de sus alumnos dilectos. La interacción droga-receptor ha sido su mensaje a través del tiempo y sigue siendo un polo de atracción para estimular el pensamiento creador……… y para preocupar a los estudiantes de pregrado y de postgrado!!.
El primer soñador de esta historia debía ir a Harvard en busca del Dr. Krayer, pero misterios que no alcanzamos a comprender desviaron el rumbo del barco que le traía de allende los mares al nuevo continente y hace que en un golpe de timón se cambien los fríos inviernos de Massachussets por las feraces tierras y el sol tropical del valle del Río Cariaco en el Estado Sucre. Obviamente, los ancestros africanos de los pobladores de esta región contrastaban abiertamente con el evidente carácter caucásico de los recién llegados, los ‘musiúes’ como probablemente les llamaron, que hablaban ‘jurungo’ como probablemente comentaron. El tiempo demostró que ni el idioma, ni la raza, ni el color de la piel impidieron que se desarrollara una relación de abierto afecto hacia los ‘doctores’ de parte de los cariaqueños, el cual se mantuvo a través del tiempo y la distancia. Me contaron mis padres que en Carúpano se hablaba del doctor alemán de Cariaco, que sabía mucho, que sabía curar. Nunca imaginé que el doctor alemán de quien hablaban mis padres, determinaría mi vida académica hasta el día de hoy …. y lo que falta.
Poco duró la alegría que los doctores alemanes trajeron a Cariaco. Otro soñador los llamó a la capital, Marcel Granier Doyeux. El sueño de desarrollar la farmacología en Venezuela les embargaba. Es así como el Dr. Granier crea un Curso de Farmacología Práctica en 1939, la cátedra de Farmacología de la Facultad de Medicina en 1943, el hoy departamento de Farmacología del Instituto Nacional de Higiene “Rafael Rangel” en 1944, la Cátedra de Farmacología de nuestra Facultad de Farmacia en 1948, y luego la de la Facultad de Farmacia de la Universidad Católica Andrés Bello. Esta última ya no existe. Yo llamaría al Dr. Granier “el precursor y creador de la Farmacología en Venezuela”. Se le puede considerar el padre de la Farmacología Venezolana. Sus palabras al inaugurar nuestra Cátedra de Farmacología tienen sentido de futuro y plantea un vínculo que desde el punto de vista de la atención a la salud, es indisoluble, médicos y farmacéuticos de la mano en la atención al paciente. Esas palabras han estado expuestas en el séptimo piso y ahora acá, y están contenidas en el libro de resúmenes de este evento.
Como soñador, el de nuestra historia, también fue forjador de sueños. Un precioso ideal, en sus propias palabras. Un viejo sueño perseguido por todos los farmacólogos de la Facultad de Farmacia desde fines de los años cincuenta, fue la creación de un post-grado en Farmacología. Este sueño se hizo realidad como el primer post-grado de ciencias básicas de nuestra universidad y del país hace 45 años, según el Oficio CU 1044 del Consejo Universitario, con la firma del Dr. Luis Plaza Izquierdo, Vice-Rector Académico, dirigida al Dr. Rafael Ángel Martínez, nuestro Decano de entonces, el 13 de Septiembre de 1963. Debía iniciarse el 1° de Octubre de ese mismo año. Testigos fueron Antonio Muskus, queridísimo Maestro, Julia Salas y Ligia Ibarra, Genara de Trujillo y Rafael Campo; a Gladys y a Rafael rendimos hoy un homenaje de respeto pero sobre todo de afecto. Salvatore Pluchino comanda este homenaje. A ustedes dos, mis queridos profesores, todo mi cariño y agradecimiento; su dedicación a la Farmacología es parte importante de nuestra inspiración.
Pioneros en el post-grado, un grupo de soñadores: Raúl Hernández, Salvatore Pluchino, Juanita Gómez, Juan Arbona, Elba Bermúdez, Clara Verde y José Núñez. Ellos cultivaron la Farmacología en los predios heredados de los viejos maestros, las escuelas de Medicina Razetti y Vargas, y la Facultad de Farmacia de nuestra querida UCV.
La soñadora y narradora de hoy, en pos de la farmacología por los pasillos de la Facultad de Farmacia, soñaba en entrar un día al aula 701 como estudiante graduada, pero parecía un sueño imposible. Y he ahí que el principal soñador del cuento tenía otras intenciones, puso en manos de Antonio Muskus una antorcha que le abrió paso a otros y a la narradora del cuento le hizo su sueño realidad, más allá del mismo sueño. En brazos de la Farmacología logramos, cruzando el Atlántico, suficiente educación y madurez como para seguir trazando el camino, desde hace 29 años. Otros como Luigi, Reiza, Irene, las Anitas, Yarisma, Chari, Irene, Beatriz, Fátima, Yaira, entre otros,… nos han acompañado en la empresa. Las nuevas generaciones de nuestra Cátedra de Farmacología formaron y forman parte de esta aventura.
Cátedra de Farmacología y Postgrado de Farmacología son sinónimos, jamás antónimos, siempre complementarios, nunca divergentes. Estudiantes y egresados del Postgrado de Farmacología, son miembros de la Cátedra, y profesores y tutores de estudiantes del Postgrado de Farmacología. Siegbert Holz, Antonio Muskus, Salvatore Pluchino y Rafael Campo, todos profesores de la Cátedra, fueron directores de esta empresa
Y qué decir de nuestros compañeros de sueños y amigos por 25 y más años. Nuestro postgrado no sería el mismo si no existieran los José Vázquez llevando nuestro corazón al ritmo de la guitarra y el cuatro con la fuerza de su voz, los Omar Verde de dedicación insigne develando los secretos de la estadística; Gianni Pinardi, nuestro querido "viejo", hoy mirándonos desde el cielo; Juan De Sanctis – docencia e investigación andantes por los predios de la inmunología, José Luis Cevallos, Tulio López y los niveles hormonales, Estela Gottberg madre de la fisiología del postgrado, Margarita y Vito Lamanna, Teresita Torrealba – siempre fiel, Dina Sharon, Neira Gamboa y Margot Ledezma dueñas y señoras de la Bioquímica, David Lea y su radiactividad, Víctor Tortorici, vencedor del dolor, Carlos Ayala, Jacobo Villalobos, Luis Herrera García, Domingo Khan, Juan Yungano, y tantos otros... Dios!!!... cuánto talento y afecto juntos en este postgrado!
A ustedes, mis queridísimos soñadores y compañeros de sueños, a los ausentes que hacen vida en el campus ucevista del cielo y a los presentes hoy, de corazón les digo que su sueño es un legado de su vida para la historia. Los frutos de SU post-grado de farmacología cubren la geografía universitaria nacional y parte de la internacional. Los representan hoy 41 Magister Scientiarum – egresados desde 1973 -, 23 Doctores – egresados desde 1992, y ..... 30 estudiantes de Doctorado hoy en día. Premios, publicaciones y el éxito profesional atestiguan sus logros. Cinco doctores en Farmacología egresarán en 2010. Cuánta satisfacción con el deber cumplido!! Esta también es cosecha de su siembra, y como dije antes, su legado, y estos frutos son nuestra mejor ofrenda para ustedes.
Qué emoción se siente al comprender que formas parte de la historia de la Farmacología en Venezuela, cierto?
Queridos Maestros y compañeros de viaje farmacológico, Uds. saben que nuestros sentimientos van más allá de nuestras palabras. ¿Cómo expresarles nuestro afecto ante el mundo, ahora y por siempre en una forma tangible? Debemos cuidar de vuestros nombres, debemos hacerlos conocer por las nuevas generaciones. Creemos que aun así no compensamos su generosidad. El tiempo será nuestro mejor aliado para seguir cultivando nuestro afecto por ustedes a través de la farmacología, y, que conste, que estamos convencidos que lo que aun nos falta por hacer es tan grande como la inmensidad del mar…. es infinito. Los de hoy y los del futuro así lo haremos, porque llevamos por dentro aquello que dice Anita Alfieri, que la Farmacología no es una forma diferente de ganarse la vida, sino una forma diferente de vivir, …..y así vivimos….
Queridísimos maestros, compañeros y amigos, muy respetado Dr. Nicolás Bianco, esta historia debe llegar a su fin por el día de hoy… para ello, quisiera parafrasear, una vez más, al Doctor Antonio Muskus, y digo: Y SI HOY, DESPUÉS DE CUARENTA Y CINCO AÑOS NOS PREGUNTARAN, ¿QUÉ HICIERON DE LOS SUEÑOS QUE LES CONFIAMOS? Debemos contestarles con mucha fuerza y emoción, AQUI LOS TIENEN CONVERTIDOS EN REALIDADES!!!
SEÑORES!!
Discurso pronunciado por la Dra. María Margarita Salazar-Bookaman el día 30 de Octubre de 2009, en ocasión del XLV Aniversario del Postgrado de Farmacología y el LX aniversario de la Cátedra de Farmacología, Auditorium “Dr. Rafael Ángel Martínez”, Facultad de Farmacia de la UCV.