- Año de Creación: 1827
- Número de Escuelas: 6
Número de Institutos: 7 - Decano: Prof. Emigdio Balda
Agresión irracional a los servicios de salud en la UCV
Por: Williams Agüero Fotos: Alberto Valdivieso
Un total de once robos ha sufrido el Instituto de Medicina Tropical (IMT) en lo que va de año. Las cuantiosas pérdidas sufridas y lo frecuente de los ataques, obligaron a suspender desde ayer el servicio que recibe mayor cantidad de pacientes en el instituto.
Debido al nivel de violencia y la recurrencia de los ataques, el personal del IMT acudió al Decanato de la Facultad de Medicina, para hacer un llamado a las autoridades y solicitar apoyo frente a la grave situación de inseguridad que padecen. El profesor Emigdio Balda, Decano de la Facultad y la Profesora María Virginia Pérez de Galindo, Coordinadora Administrativa, recorrieron el recinto junto al Director encargado del IMT, profesor Tomas Hermoso y el Jefe del Seguridad de la UCV, Agustín Chirinos. Constatando la excesiva violencia de los delincuentes que arremetieron contra la institución y escuchando los testimonios del personal de cada sección y departamento.
“La sección de inmunología del Instituto de Medicina Tropical, se encargaba del diagnóstico de toxoplasmosis y enfermedad de Chagas, y es un centro de referencia nacional. Muy pocos laboratorios a nivel nacional hacen lo que hacemos nosotros. El 90% de las pacientes que atendemos acá, son embarazadas y personas con VIH, a las cuales a partir de ayer se suspendió totalmente el servicio porque nos vimos afectados muy fuertemente en cuanto a la infraestructura.”, aseguró el Licenciado Arturo Muñoz, Jefe de la Sección de Inmunología (E).
Muñoz relató que todos los equipos de serología fueron dañados y las computadoras sustraídas, afectando gravemente la posibilidad de realizar diagnósticos a los pacientes. Por otro lado el laboratorio de biología molecular donde se realizaban pruebas especiales, y que contaba con equipos valorados en más de dos millones de bolívares, fueron tirados al suelo y dañados.
“La parte de secretaría fue totalmente desmantelada por lo cual no podemos imprimir resultados de los pacientes desde la semana pasada que ya estaban listos”, añadió.
La investigación del laboratorio también se ve afectada, computadores de los investigadores fueron sustraídos y con ellos una base de datos de aproximadamente veinte años. Entre los datos perdidos se encontraba información recopilada por investigadores que trabajaban en proyectos internacionales.
El personal que labora en la institución está desprotegido
Docentes, investigadores y personal administrativo ofrecieron sus testimonios frente a la grave situación. Principalmente fue planteada la necesidad de contar con vigilancia y que se realicen rondas. Al respecto varios trabajadores manifestaron que un solo vigilante no es suficiente, aseguran que la estructura debería tener al menos tres vigilantes, debido a lo amplio del área que comprende el instituto.
Recopilamos algunas de las inquietudes expresadas por integrantes del instituto afectado, muchos de ellos manifestaron sentirse desmoralizados porque la situación cada día es más grave, continúan los robos y sienten que no hay interés por atender la problemática de inseguridad:
- La situación no solo afecta a la institución y a su personal, también aqueja a la comunidad. Muchos de los pacientes que utilizan los servicios del instituto, son personas de bajos recursos económicos, ellos acudían al instituto por los bajos costos de los exámenes.
- Equipos costosos tales como: impresoras, fotocopiadoras, routers, que utilizaban para dar clases se los llevaron. Muchos de los equipos hurtados, fueron adquiridos por el personal de la institución para poder seguir ofreciendo el servicio a los pacientes.
- Aseguraron que en algunos departamentos estaban trabajando sin equipos de computación y lo poco que tenían también fue sustraído por los delincuentes.
- Algunos docentes dictan clases hasta horas de la tarde. Existe angustia porque no saben lo que sucederá.
- Mañana miércoles todo el personal de la institución fue convocado a una asamblea a las 9:00 de la mañana ante la gravedad de la situación.
A pesar de las denuncias realizadas ante organismos policiales (CICPC), y que las autoridades de la Facultad han realizado planteamientos en diferentes instancias para tratar la problemática, no ha sido posible subsanar esta grave situación que afecta la labor del docente investigador, y que hace imposible continuar prestando servicio a pacientes de bajos recursos.